OJOS CERRADOS

jueves, 23 de abril de 2009

De oriente a occidente, de norte a sur

Junto al aeropuerto se encontraba mi casa, pequeña pero de buen gusto, con un porche limpio y lleno de flores, donde mi abuela se sentaba a recordar todas las mañanas las cosas que alguna vez habia disfrutad y de vez en cuando escuchaba un disco viejo de jazz y esbozaba una sonrisa con cada nota nueva.
Fue en aquella pequeña ciudad donde mi padre murió y donde aquel mismo día conocí a "mi sombra invisible".

Mi padre trabajó 37 años para la fuerza aérea, siempre estuvo en buena forma y nos cuidaba de cualquier enfermedad posible, amó a mi madre hasta el día de su madre hassta el día de su muerte, o al menos eso creo yo. Sus únicos defectos fueron su toque de egocéntrismo que me alejó de él y el vicio del tabaco.
Ella por su parte, "mi sombra invisible", vivia del otro lado del aeropuerto, nunca la habia visto hasta aquél día. Cuando sepultamos a mi padre todas las personalidades de la fuerza aérea fueron a despedirlo, ese mismo día ella sepultó a su madre y en su lecho de muerte se encontraban solo la hija maor, el padre y la tía, junto a la lápida de mi padre la suya se notaba bastante triste y solitaria, como si en aquél sitio hubiera muerto un actor de tercera.
Yo a decir verdad me sentía bastante lejado de mi padre y en vez de llorarle me dediqué a escribir una nota para la hija de la muerta solitaria.

La invité a ver los aviones que pasan por encima de un parque cerca de casa, parecia que a los dos nos faltaba algo, asi que por lo menos algo teniamos ya en común.

Esperé unas horas en el sitio indicado pero nunca llegó, no me pareció algo deprimente ni mucho menos triste, la mayoría del tiempo estaba solo, no tenia mucha suerte con las mujeres de ninguna edad o clase en especial, habia momentos en que hasta mi madre me despreciaba. No fui muy bien parecido tampoco en ese entonces, la verdad es que la chica aquella tampoco pero a mi me parecia lo suuficiente bella.

Luego de un rato un viejo ciego se sentó a mi lado y comenzó a contarme algunas cosas, poco interesantes para ser francos, me enseñó a escuchar el viento y a apreciar las hojas de los árboles con las palmas de las manos.Luego comenzó a hablar de las estrellas y me contó una historia, de un hombre que había jurado amor eterno a una mujer, lo hizo ante la luna y dijo que dejaría de amarla cuando termianara de contar las estrellas, en ese entonces me pareció lo más estúpido que había escuchado en mi vida, puesto a que mi mente se reducia a los libros de ciencia ficción de Bradbury y el rock clásico de Led Zeppelin.
Como no estaba de humor le hable con la verdad al viejo y le dije de una manera amable que su historia me parecía bastante absurda y que no creía ni en las estrellas ni en la luna y mucho menos en los juramentos de amor, guardó silencio por unos minutos, luego me dijo que le gustaba ver la lluvia, que en las noches de tormenta sus ojos conocían otros horizontes, que podía ir de oriente a occidente y de norte a sur con solo guardar silencio y cerrar los ojos. Me pareció de verdad inprobable que un hombre ciego disfrutara de ver la lluvia y me levnte de aquella bancaazúl que había en el parque.
Unos días después volví a ver la lápida de mi padre y a limpiar los restos de las flores viejas y los pétalos secos, comenzó a llover, después de meditarlo un momento me recosté soble el césped mojado y cerré los ojos, fue entonces la primera vez que vi la lluvia, fui de oriente a occidente y de norte a sur y aún no termino de contar estrellas.

viernes, 3 de abril de 2009

Mi dulce sirena encantada


Hoy los fantasmas del pasado se han convertido en los del futuro y tu quedaste como ningun otro ser, mi santo y puro amor, la sombra de mis sombras, el miedo de mis miedos. Todo es posible en este mundo menos tu, obra de dioses, ¿Quién osó ponerte nombre alguno? o ¿Quién algún día logró llamarte por él mismo?.
Benditos los que te hemos conocido Sirena de agua dulce, Dichosos los que hemos muerto en el intento de tocar tus sucias alas y malditos aquellos ángeles que disfrutan de ti y de tu cuerpo, de tus cabellos. El agua que surgió en la noche de las horas perdidas se encuentra a tu lado en el mismo lugar donde habitan las criaturas hermosas y los sueños rotos, pirata de mares lejanos inexistibles pero noble servidor tuyo. Cuerpo de piedra corazón de oro, mi te soro más sercano y más lejano,hija de triton, diosa de mis aguas y las de nadie.

¿Qué hace un triste y viejo pirata, buscandote?, Mi sol, Mi sombra, Mi sirena bendita. Canta hermosa, Canta tu mi cielo entero y entona mis días y mis noches arruya mi triste y frío corazón esperanzado.